Todos entendemos la necesidad de una serie de reformas al sistema tributario, económico del país. Que es necesario reformular el Código Laboral. Que hay que sacar y poner en operación el nuevo Código Penal.
Es necesario, imperativo, la concertación nacional entre la fuerzas políticas, económicas y sociales que gravitan sobre el país para poder enfrentar los problemas y desarrollar los programas de beneficio para la nación.
El gobierno de Luis Abinader tiene las herramientas en las manos para ‘imponer’ acciones y decisiones, con su mayoría congresual y por ende el control de los estamentos del Estado, incluyendo poderes como la Justicia, y los de segunda línea, como el municipal, el de control fiscal y hasta del electoral. Sin embargo, no ha ejercido ese poder y ha dado demostraciones de procurar lograr concertaciones, acuerdos, pactos.
De ahí, entonces, que el llamado a la concertación de un Pacto de Concordia Ciudadana, hecho por el Listín Diario, es una gran oportunidad para lograr avanzar en los proyectos que necesitamos, todos, como nación. Cuando inició su gestión de gobierno, en 2020, Abinader acudió a las oficinas de sus contrarios, de los opositores, abriendo las puertas a un diálogo que no cuajó. Lo propio hizo al iniciar su nueva gestión, tras ganar las elecciones de 2024, con igual suerte.
Ahora, ante la propuesta seria de un tercero imparcial, como ha hecho el Listín, se presenta de nuevo la oportunidad de sentarnos frente a frente, de hablar cara a cara, sin egos, sin tapujos, sin resquemores, sin temor a las zancadillas.
Nuestra democracia es fuerte y es momento de demostrarlo. Hagámoslo como buenos dominicanos, por el bien de todos.
