Redacción HoraxHora
El apagón del 23 de mayo que dejó sin luces la pista de aterrizaje del aeropuerto Las Américas y que paralizó los vuelos por unas cinco horas, fue un ‘simple acto de vandalismo’ para el gobierno.
José Ignacio Paliza, ministro Administrativo de la Presidencia y considerado uno de ‘los hombres del presidente’ dijo que el hecho pone en evidencia la necesidad de “mejorar la seguridad del propio aeropuerto, como la seguridad que provee el Estado a los alrededores del mismo”.
En una entrevista con CDN, Paliza dijo: “Esto fue producto de vandalismo menor y de personas que vulneraron la seguridad del aeropuerto” y entiende que “la comunicación inapropiada del caso sea la posible razón de cierta confusión en la población con respecto al tema”.
Dos jovencitos de La Caleta están presos con medidas de coerción aplicadas por el hecho.
Tras el caso, la prensa registró que los responsables de la administración del AILA, la empresa Aeropuertos Dominicanos (AERODOM), procedieron a instalar nuevas camaras de seguridad para reforzar la vigilancia de la terminal.
Esta fue nuestra historia anterior sobre el tema
‘Sabotaje’, ‘vandalismo’ o ‘robo’ mostró débil seguridad del AILA
Redacción Central de HoraxHora
El apagón de la noche del domingo 23 de mayo pasado puso en evidencia la vulnerabilidad de las instalaciones del Aeropuerto internacional Las Américas (AILA), cuya seguridad ha sido violentada en varias ocasiones, aunque el jefe de seguridad, el CESAC, el general Carlos R. Febrillet Rodríguez, FARD, dijo que esa terminal es “ciento por ciento segura”.
El Presidente Luis Abinader, quien estaba fuera del país cuando ocurrió el episodio, dijo el primero de junio que dos personas han sido arrestadas y se investigan otros, garantizando que la población será enterada de lo ocurrido.
¿Fue un sabotaje?, si fue así ¿qué se perseguía? ¿Quiénes fueron los responsables? ¿Cómo se violentó la seguridad del AILA? ¿Cuán eficiente es la seguridad de la terminal? ¿Qué ha pasado con las cámaras de seguridad, de alta sensibilidad, que fueron retiradas ddesde hace tiempo, como se ha filtrado?, de ser así ¿quién decidió y por qué retirar las cámaras?
El 5 de junio, Diario Libre, en una nota bajo la firma de la periodista Paola Wisky, citaba que dos semanas después del episodio, las autoridades calificaban el caso del AILA como “un robo simple”, luego que la Policía informara que el viernes uno de cuatro investigados, Luis Abel Bens (Chiricui o Alicui), se entregra a las autoridades. El joven, de 21 años, era buscado en relación al caso. La Policía informó en un comunicado que Bens, junto a su hermano, “sustrajeron 800 pies de cables eléctricos de goma y bronce BC 5KV, XLPE, rojo, siete transformadores de aislamiento de 45 watts, 20 conectores primarios KD de 50, ubicados en la cabecera 35 de la pista de aterrizaje” del AILA. Y citó el Diario Libre, de acuerdo al comunicado de la Policía que “los jóvenes tenían el hábito de ingresar a las inmediaciones del aeropuerto para buscar desechos y que el fallo se produjo luego de que ambos penetraran por el Mega-Puerto a través de un camino desolado”. La Policía dijo que “recuperó los cables y las pinzas empleadas en el hecho”. Diario Libre trae de background el hecho de que “un caso de robo conocido, fue el registrado en octubre de 2008 cuando personas no identificadas sustrajeron cuatro mil pies de cables eléctricos, lo que equivale a un kilómetro”.
Y la gran pregunta ¿qué tan seguro, y quien lo garantiza, son las instalaciones del aeropuerto Las Américas? Las preguntas flotan en el aire y la gente, la sociedad, quiere y espera respuestas.
A las 7.10 de la noche de ese domingo 23 de mayo, se produjo un apagón que dejó a oscuras la pista principal de despegue y aterrizaje de Las Américas. Se estableció que los cables que alimentan la energía para el encendido de las luces de la pista, que están instados dentro de un área de seguridad de la terminal, fueron cortados por desconocidos, lo que provocó que fueran desviados a otros aeropuertos varios aviones prestos a aterrizar, mientras algunos que se preparaban para salir del país fueron abortados por lo menos durante unas cinco horas, cuando fue puesto en operación un sistema de luces de emergencia, que tampoco funcionaron de manera automatic, cuando falló el sistema regular.
El tema provocó un escándalo al informarse que se trató de un “sabotaje”. Agentes del Departamento Nacional de Investigaciones (DNI) encabezan las pesquisas del caso.
Días después del cruce de informaciones contradictorias sobre lo ocurrido en Las Américas, la nación no tiene un informe definitivo de lo ocurrido y, menos, quienes serían los responsables en caso de determinarse que realmente fue un “sabotaje”, el propósito, de ser así, como tampoco se ha explicado de manera convincente porque fueron retiradas las cámaras térmicas de alta resolución, el sistema principal de seguridad de la terminal.
El mejor ejemplo de los débiles sistemas de seguridad en Las Américas se registró la misma noche del “apagón” cuando muchos viajeros se quejaron sus equipajes fueron violados y contenidos robados durante el episodio y mientras sus maletas y bultos, ya chequeados como equipaje para vuelos a tomar y otros que habían llegado y estaban listos para ser llevados a los aviones en que viajarían y/o a las correas de recibo.
La violación de equipajes en las áreas de distribución, hacia los aviones que salen del país o para las correas de entrega de los que llegan, son reiterados, pero no son las únicas denuncias. En 2018 y 2019 se denunciaron robos en almacenes de curriers de donde personas se llevaron paquetes y artículos; el 28 de febrero de 2021 un hombre, de nacionalidad canadiense, penetró con su vehículo hasta la pista del aeropuerto; el 29 de marzo de 2021 ladrones cortaron y robaron parte de la malla ciclónica que sirve de ‘seguridad’ al área de la terminal. También los medios de comunicación tienen registros de robos de cableados eléctrico en las inmediaciones e instalaciones de la terminal.
Versiones de prensa, no desmentidas por las autoridades, indican que el sistema de vigilancia por cámaras y sensores de movimiento están fuera de servicio desde hace un tiempo, lo que es sabido por personal que trabaja en las instalaciones del AILA, donde confluyen una decena de organismos oficiales, incluyendo de alta seguridad del Estado como el DNI, la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), diferentes departamentos de inteligencia militar, la Policía Nacional, el Cuerpo Especializado en Seguridad Aeroportuaria y de Aviación Civil (CESAC). Así como Migración, Aduanas, Aviación Civil.
El aeropuerto opera bajo contrato con la empresa privada Aeropuertos Dominicanos (AERODOM) que maneja toda la parte operativa de la terminal, mientras los servicios de seguridad están a cargo de los organismos del Estado.
Las versiones: ‘vandalismo’, ‘sabotaje’, ‘incendio’
En la noche del apagón, en su cuenta de twitter la Vicepresidenta Raquel Peña –esa noche en funciones del Poder Ejecutivo de la Nación dado que el Presidente Luis Abinader estaba fuera del país, de viaje en Ecuador por la toma de posesión del Presidente Guillermo Lasso- escribió: “La investigación realizada por el Cuerpo Especializado en Seguridad Aeroportuaria y de la Aviación Civil (@CESAC-RD) confirmó que un acto vandálico provocó la salida de servicio de las luces de la pista de aterrizaje del Aeropuerto Internacional Las Américas”.
En otro twitter dijo: “Los delincuentes penetraron hasta el perímetro restringido, cortaron los cables que alimentan las luces de la pista, dejándolos tirados en el área. Las autoridades continuarán la investigación para establecer el móvil del acto vandálico”.
Esa misma noche el CESAC había informado que el apagón en la pista del AILA se produjo “por un incendio en los cables eléctricos que alimentan el sistema de iluminación de la pista de aterrizaje del aeropuerto Las Américas”.
Oficiales de servicio en el AILA dijeron, de su lado, que se había producido un “cortocircuito en el cableado y un incendio en la zona de alimentación del alumbrado de varias secciones del aeropuerto, incluyendo la pista de aterrizaje, por lo cual fueron desviados vuelos de España, Puerto Rico y Estados Unidos previstos a aterrizar”.
No fue hasta el lunes 24 mayo cuando la palabra “sabotaje” salió a la prensa y el martes 25 de mayo cuando el director del CESAC, general Febrillet Rodríguez, estando al lado de la Vicepresidenta Peña cuando recibían un cargamento de vacunas en la pista del AILA, dijo que “ningún aeropuerto en el mundo es ciento por ciento seguro, pero Las Américas es completamente seguro”. No dijo nada de las cámara de seguridad fuera de servicio ni de quienes se sospechaba que hubiera cometido el “sabotaje” o el “vandalismo’ o de sus propósitos.
El martes 01 de junio, el presidente Luis Abinader, dijo que que la seguridad del aeropuerto Las Américas enfrentó problemas la noche en que ocurrió el supuesto sabotaje con las luces de la pista de aterrizaje luego que la persona encargada de vigilar la zona por la que los intrusos entraron a la terminal, se habría retirado de su puesto tras presentar la excusa de que tenía problemas de salud, una hora antes de que se registrara el incidente. Esa persona estaba bajo arresto mientras las autoridades buscaban otras tres, una de las cuales se entregó a las autoridades el 2 de junio. Por lo menos 20 personas habían sido interrogados.
Abinader aseguró que cuando sea completada la investigación, se informará a la población que fue lo ocurrido.
Atención internacional
El periódico en la web acentro.com public, el 04 de junio, atribuyendo a Fuentes confiables que la seguridad del AILA es motivo de seguimiento de organismos internacionales de aviación y de diferentes países que operan vuelos con República Dominicana.
Esto citó acento.com:
“Los eventos de sabotajes, robos y vandalismo en el perímetro del Aeropuerto Internacional de las Américas, José Francisco peña Gómez (AILA-JFPG) ponen al país bajo la lupa de la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos y demás autoridades aeronáuticas de países que operan rutas aéreas comerciales hacia la República Dominicana.
Las embajadas de Estados Unidos, España, Canadá y Francia dan seguimiento a las indagaciones que realizan los organismos de investigaciones del Estado y la Fiscalía de estos casos, que ponen en riesgo la seguridad de la aviación civil y comercial.
Estas representaciones diplomáticas vienen solicitando información a las autoridades criollas de la situación provocada por el corte intencional de los cables eléctricos que provocó el apagón de las luces en la pista de aterrizajes el pasado domingo 23 de mayo.
Los casos de sabotaje y vandalismo a las instalaciones del AILA-JFPG pudieran afectar los procesos de negociación de permisos de explotación de rutas áreas que las autoridades dominicanas discuten con países de Europa, Asia, Medio Oriente y Latinoamérica.
El desplome en los sistemas de seguridad perimétrica en el principal aeropuerto dominicano se produce precisamente cuando el país inicia la recuperación del turismo, afectado por la pandemia del covid-19 desde marzo de 2020”.