- • Con la venia de la Constitución y los reglamentos del Partido Revolucionario Moderno, PRM, el presidente Abinader se apresta el venidero 16 de agosto, día de la Restauración, a declarar que acepta la nominación presidencial de su organización para las elecciones del 2024.
El presidente Luis Abinader y le ministro de turismo, David Collado, chocan los puños durante acto de promoción turística.Listin Diario
Abinader, sin ninguna otra alternativa, porque sería dejar a su partido en un trance sin precedentes en la política, se perfilaría desde el momento como el posible ganador de la contienda electoral para presidente de la República, ya en la primera vuelta o en una segunda.
Con un sector del electorado que según las encuestas está entre el 48 y más del 50% para ganar en primera vuelta, seguramente que el gobernante querrá producir un impacto que lo deje como indiscutible ganador de los comicios con su mensaje desde Cabo Rojo, Pedernales.
El lanzamiento del presidente en ejercicio reta al ex presidente Leonel Fernández, del partido Fuerza del Pueblo, elegido ya tres veces a la Presidencia y al novicio Abel Martínez, alcalde de Santiago y postulado por el Partido de la Liberación Dominicano, PLD.
El discurso de Abinader se producirá a su retorno de un viaje a la ciudad de Nueva York el fin de semana, donde tendrá un programa apretado con la comunidad dominicana de esa ciudad norteamericana y actos y reuniones oficiales con el senador estatal Adriano Espaillat.
Abinader corre dentro de su partido sin oposición. Nadie reta sus posibilidades de postularse para facilitar lo cual, el PRM derogó una prohibición reeleccionista que tenía en sus reglamentos. La Constitución expresa que el presidente podría repostularse por un período más.
Las dos premisas partidaria y constitucional se añaden al interés del gobernante de concluir un extenso programa de gobierno que incluye la puesta en vigor del polo turístico de Pedernales, una de las regiones más deprimidas del país y que fuera tema de su campaña.
Abinader pudiera temer, que de no ir, se abriría una “olla de grillos”, entre dirigentes de segundo rango, carentes de la popularidad suficiente para enfrentar y derrotar a uno de los candidatos opositores, notablemente al ex presidente Fernández empeñado en sobrevivir.
Fernández, de FP aparece en la mayoría de las encuestas como segundo en preferencias, pero lejos de Abinader, aunque en los mentideros políticos se afirma que Martínez, del PLD ha crecido bastante en las últimas semanas quizás a costa de la tasa de rechazo del ex presidente.
Martínez que tiene su bastión en Santiago, donde es alcalde, y ha hecho hasta ahora una precampaña pálida frente a la de Abinader y la de Fernández, quien viene movilizando a partidarios y beneficiarios de sus tres gobiernos que lo ven como su tabla de salvación.
Abinader ha dominado la política exterior y el tema sensitivo de Haití. Reclamó en el seno de la ONU, la OEA y el CARICOM acción para frenar el bandidaje que prevalece en Haití. Sus reclamos encontraron eco en que se programe una intervención de varios países para reforzar la Policía Nacional de Haití.
El tema de la postulación de Abinader para un nuevo período dividió a la familia presidencial. Mientras su esposa, Raquel Arbaje y la hija mayor Esther Patricia apoyan la postulación, las otras dos hijas dudan y preferirían que el padre de familia vuelva y se quede en casa.
Abinader mismo no está tan conforme con el ambiente del Palacio Nacional que rara vez ha sido utilizado como vivienda por los presidentes dominicanos. Al Palacio le faltaría un poco de cuidado y mantenimiento permanente de sus instalaciones, un chef de cocina para no depender de los platillos preparados en hoteles de la capital.
El caso hipotético
El caso hipotético de que Abinader no anunciará que concurrirá a las elecciones presidenciales venideras, deja a los partidarios y seguidores de su gobierno pensando en un nombre muy mencionado: David Collado, quien así heredaría la obra del presidente.
Collado, a quien postuló el PRM a la alcaldía del Distrito Nacional en las elecciones de 2016, tras la debacle de su antecesor, Roberto Salcedo, elegido varias veces al puesto, había sido diputado por la capital (2010-2016). Abinader lo nombró ministro de Turismo en el 2020.
Como ministro de Turismo, Collado ha sido tan exitoso que se cree que el país podría recibir a finales del año más de 8 millones de visitantes que no son nativos. La promoción para que los turistas retornen después de la pandemia ha sido uno de los puntos fuertes del régimen. En 2022 visitaron RD más de 7 millones.
Las encuestas colocan a Collado como el político mejor valorado detrás de Abinader y su discurrir en las posiciones la ha manejado con espíritu sosegado sin entrar en conflictos con nadie y cuidándose de que a su alrededor se creen bolsones de corrupción como en otros casos.
Apoyo en economía
Abinader se ha apoyado en sus tres años en el gobierno en la economía dominicana que ha experimentado crecimiento en sus principales variables y que le ha permitido utilizar fondos presupuestales y del encaje legal del Banco Central para promover las empresas y las viviendas.
El gobernante se ha propuesto hacer valer el gobierno del cambio en la mejoría de la calidad de vida de los dominicanos, generar oportunidades en todo el país, dignificar los programas sociales “y construir la República Dominicana que merecemos”, afirmó en su última rendición de cuentas.
El Banco Central ha tomado medidas para disponer fondos extraordinarios para el fomento de las empresas y el consumo. Divulgó recientemente que la tendencia de la inflación seguía en descenso, ubicándose en 3.95% en julio pasado, por debajo del valor del rango meta del 4%.
Abinader ha mejorado las pensiones, ha aumentado los salarios de médicos, militares, policías y profesores de las escuelas como nunca antes se hizo, lo que ha permitido dinamizar el circulante en momentos en que la carestía de productos importados ha golpeado la economía familiar.
