Forzados por las circunstancias, por primera vez en casi cinco años Leonel Fernández y Danilo Medina se vieron la cara, frente a frente, y en presencia de sus lugartenientes y de quienes los observaron en fotos y videos difundidos por los medios periodísticos.
¿Cuál será el efecto electoral del encuentro, puesto en escena por ‘Rescate RD’ el lunes?
De acuerdo a las encuestas profesionales de mayor prestigio y renombre publicadas en las últimas semanas, el partido de gobierno y su candidato en reelección, Luis Abinader, se proyecta a arrasar en las elecciones del 19 de mayo.
De ahí que el esfuerzo de los dos principales líderes de la oposición, Leonel y Danilo, parece tener poco efecto, más allá de enviar una ‘imagen’ -que por demás se vio obligada, poco espontánea-, lo que necesariamente no se traduce en votos, como para ponerlos en competencia con el oficialismo y su candidato.
La urgida búsqueda de un efecto cuantitativo -al final lo más importante en las elecciones- llega tarde, torpedeada por los mismos líderes opositores que el lunes proclamaron unidad y al mismo tiempo anunciaron que siguen separados, cada uno por su lado. El esfuerzo forzado, entonces, en vez de sumar los aleja en su desesperado afán por lograr una eventual segunda vuelta, que han señalado como su única ‘tabla de salvación’.
Los egos, las malquerencias, los recelos están cobrando sus frutos. No hubo ‘humildad’ y menos visión política a lo largo de casi cinco años de traiciones, enemistades y alejamiento.
De ahí que creo que el ‘esfuerzo’ forzado del lunes, llegó muy tarde.