Esta semanas se estaría ‘cuajando’ –aunque no se anuncie de inmediato- los acuerdos, alianzas, estrategias de la oposición para enfrentar al partido oficial en las elecciones de 2024.
Porque todo no es la candidatura presidencial –aunque sea la que más cautive- ya que las conformaciones de los ayuntamiento, el Senado y la Cámara de Diputados tienen trascendencia en la correlación de fuerzas, negociaciones políticas obligatorias, pese a convivir en un régimen presidencialista.
Abinader ha generado ‘expectativas’ –que está consultando, analizando, que no es partidario de la reelección consecutiva- aunque todo el mundo sabe y espera –en especial Danilo, Leonel, Miguel- que lanzará su repostulación en busca de reelegirse en mayo del 2024.
Este anunció deberá hacerlo dentro de los próximos siete días, toda vez que el 17 de agosto –el jueves de la semana que viene- los partidos deben registrar en la Junta Central Electoral las nóminas de sus precandidatos a las primarias de octubre, cuando deberán escogerse los candidatos para las elecciones municipales, de febrero, y las congresuales y presidenciales de mayo de 2024.
Una repostulación que obliga a la oposición -encabezada por el PLD, FP y PRD–, por encima de los egos y malquerencias de sus líderes, dirigentes y militantes a buscar acuerdos y alianzas para poder enfrentar a los candidatos del PRM, hoy la organización más grande y con poder en el escenario político-electoral nacional.
Por ello asistimos a una agudización en las críticas, denuncias, quejas de la oposición así como de una oleada de propaganda sobre lo realizado, por parte del oficialismo.
Ese es el escenario que caracterizará los próximos siete meses.