La Procuraduría General de la República incineró más de 1,220 kilogramos de distintas sustancias narcóticas, incluyendo mil kilogramos de cocaína.
La Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y el Ministerio Público ocuparon los narcóticos que formaban parte de 821 casos y tenían un peso total de 1,220.02 kilogramos.



