Juan Acosta
Especial para HoraxHora
Lo ocurrido este domingo en varias localidades de Cuba no ha sido el primer asomo de protesta durante los últimos meses, pero sí el que más ha preocupado el gobierno, tanto que el presidente Miguel Díaz-Canel tuvo que llamar a sus seguidores a ‘enfrentar a los disidentes’.
De manera sorpresiva, el mundo se enteró que miles de ciudadanos salieron para protestar a las calles de San Antonio de los Baños y La Habana, exigiendo con palos y piedras, un ‘cambio al régimen de la isla’.
«No tenemos miedo» y «Libertad», eran los gritos de guerra de los grupos que se apoderaron de un sector de la capital de Cuba, así como ciudades y localidades como: Matanzas, San Antonio de los Baños, Güira, Palma Soriano, entre otras.
Versiones de prensa internacional indican que por lo menos una veintena de personas fueron arrestadas. Algunos fueron heridos en las confrontaciones, que incluyeron saqueos a tiendas, entre ellos periodistas.
Hace ya varias décadas que no había un movimiento de tal magnitud pública en la isla, por ello, miles de cubanos alrededor del mundo expresan su apoyo a los contingentes que exigen libertades abiertas, elecciones libres y el acceso a la atención médica básica y la comida, entre otras demandas.
En la comunidad miamense conocida como “La Pequeña Habana”, se denunció cortes de internet por parte de las autoridades de la isla, para mantener bajo control la situación de difusión de lo que ocurría a lo interno de la isla.
Por eso, miles de cubanos reportaron que la situación subió de tono y los enfrentamientos contra la policía se constituyeron en el tema principal este domingo, por lo que las redes sociales hicieron un llamado para difundir “lo que está pasando en La Habana”.
Como en otras ocasiones, el gobierno atribuyó la inconformidad del pueblo al bloqueo impuesto por los Estados Unidos, asegurando que se trata “de una estrategia mediática para desestabilizar la isla”.
Mientras se desentraña el trasfondo de esta manifestación, lo cierto es que se trata de uno de los movimientos sociales más importantes de Latinoamérica en la última década, porque podría significar un cambio de vida para todos los habitantes de Cuba, tras un régimen con más de 50 años de vigencia.
Hace poco, pasó lo mismo
También un fin de semana en abril recién pasado, moradores del sector San Isidro, en La Habana Vieja una multitud impidió que la policía esposara y detuviera al rapero contestatario Maykel Osorbo, en un poco común desafío a las autoridades, según muestran videos publicados en redes sociales.
Esos videos muestran cómo decenas de personas seguían al rapero hasta la sede del Movimiento San Isidro, el grupo de jóvenes artistas al que pertenece, e iniciaron una protesta callejera en la que cantaron consignas por el cambio y en contra del presidente.
También en Santiago de Cuba, decenas de personas, lideradas por el opositor José Daniel Ferrer, pusieron en marcha semanas antes una huelga de hambre que llamó la atención de personalidades, gobiernos e instituciones, incluida la Unión Europea.
A esa protesta llegaron a sumarse alrededor de 45 personas, incluyendo algunas fuera del territorio cubano, según datos suministrados por la opositora Unión Patriótica de Cuba (Unpacu).
La reacción gubernamental a este acontecimiento se produjo a través de un artículo publicado en el diario oficial Granma, en el que se acusó a los que se encontraban en huelga de hambre de intentar protagonizar una «farsa» y de «pretender armar un show mediático».
Al igual que ahora, el vídeo difundido en abril lanzó la proclama “Patria y vida”: el duelo musical entre el gobierno de Cuba y la disidencia”.
Sobre los disidentes de San Isidro, los medios de comunicación estatales los acusan de organizar provocaciones y estar al servicio de la «mafia anticubana» de los Estados Unidos.
Maykel Obsorbo
Debido al impacto que tuvo el caso del rapero Obsorbo, el portal de la BBC Mundo le contactó para conversar sobre el incidente que le involucró, y la huelga de la Unpacu. Se acuerda que el artista y activista se cosió la boca el año pasado en protesta contra las autoridades, lo que robustece la creencia de que «hay cosas que están cambiando en Cuba».
Según refiere la publicación del informativo británico, Maykel, cuyo nombre de real es Maykel Castillo, nació en La Habana en 1983, criándose sin padres, cursando solo el cuarto grado y pasando por centros de reeducación de menores.
“Posteriormente encontró en la música y en la lucha por los derechos humanos en su país un motivo para seguir luchando, para seguir viviendo», convirtiéndose en una de las voces jóvenes más críticas con el gobierno.
El incidente
Respecto al incidente ocurrido en San Isidro, el intérprete, narró que la situación fue una reacción ante las detenciones que realizaban agentes policiales, encontrándose entre los arrestados la artista Tania Bruguera, cuando visitaba unas amistades del lugar.
“Cuando estaba allí, llegó un policía en una patrulla y le pidió documentos a uno de ellos, porque supuestamente lo habían visto que se había bajado el nasobuco (mascarilla) un rato antes… yo le dije que eso que estaba haciendo era una violación del estado de derecho y ahí me pidieron mi identificación. Yo les digo que no tengo carnet de identidad. Porque me lo quitaron diciéndome que para personas como yo no hay carnet y, como no tengo identificación, cada vez que me lo pide la policía, me llevan preso”, narró.
Agregó que “fue el pueblo que me defendió. Le decían a la policía: no te lo vas a llevar y le cerraban el paso a la patrulla… y así fue un rato, hasta que apareció alguien que me dio una bicicleta y llegué a la casa de Luis (Manuel Otero Alcántara, líder del MSI), quien se sorprendió, porque me ve con la esposa en la mano. Pero ahí también vemos que mucha gente había venido detrás de mí, me estaban cuidando y ahí fue cuando Luis y yo empezamos esta protesta…”.
